Claudio tiene 19 años y no terminó la secundaria. Su mamá, Yolanda, le insistía a diario que fuera a clases, pero él siempre respondía lo mismo: “no me gusta la escuela. Tampoco estudiar”. Sin embargo, hace ocho meses, cambió de parecer. Cuando lo detuvieron y lo trasladaron al complejo penal de Villa Urquiza, Claudio se dio cuenta de que le faltaba algo, además de la libertad. “Por eso, decidí estudiar”, explica. Desde hace tres meses, él es uno de los más de 20 reclusos del penal que a través de una iniciativa del Ministerio de Educación, participa del Programa Jóvenes con Más y Mejor Trabajo, que se desarrolla en las unidades 1, 2 y 5 del penal. Ayer, Claudio y sus compañeros recibieron por primera vez una tarjeta magnética a través de la cual accederán a la remuneración que perciben todas las personas que participan del programa. Del acto participaron representantes del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, del Ministerio de Seguridad Ciudadana, de la Subsecretaría de Empleo y de la Oficina de Empleo de la capital, que también intervienen en la implementación del programa en contexto de encierro.
Unos meses antes de ingresar al penal, Claudio tuvo un hijo, pero pasaron poco tiempo juntos. “Casi no lo conocí”, cuenta con los ojos inundados de lágrimas, mientras su mamá lo abraza, en la capilla de Villa Urquiza. Por eso, el recluso se propuso ser un mejor padre cuando cumpla con su sentencia. “Cuando esté afuera quiero trabajar como electricista para darle un futuro mejor a mi hijo”, señala Claudio, que participa del taller para ser Auxiliar Electricista. Sus compañeros también toman clases de Jardinería y para ser Profesores de Construcciones.
La referente del Programa de Educación en Contextos de Encierro de la Dirección de Educación de Jóvenes y Adultos, Patricia Manca, explicó que la tarjeta por la que percibirán el dinero los reclusos es entregada a un familiar, quien se hará cargo de administrarla. “La idea del programa es insertarlos laboralmente. De hecho, seis chicos que ya están en libertad y que participaban del programa en el penal están trabajando afuera, gracias a la articulación entre la Oficina de Empleo de la provincia y el Ministerio. Los ubicamos en escuelas donde pueden completar la terminalidad”, indicó.